VITAMINAS Y MINERALES

 

 

 

 

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Vitamina D


Calciferol o Antirraquítica.
Se ingiere a través de la dienta, como todas las vitaminas, pero también por medio de la luz solar. Los rayos ultravioletas actúan sobre la provitamina D3 de la piel para producir la vitamina que es luego absorbida por el cuerpo. Después de su absorción desde el intestino o su elaboración en la piel, la vitamina D se almacena en el hígado, aunque también lo hace en la piel, el cerebro, el bazo, y los huesos. El organismo puede almacenar, a diferencia de otras vitaminas, considerables cantidades.

Esta vitamina asegura una utilización idónea del calcio y el fósforo necesarios para unos dientes y huesos fuertes. Tomada junto con las vitaminas A y C ayuda a prevenir los resfriados. Por ultimo contribuye al tratamiento de la conjuntivitis y a asimilar la vitamina A. El raquitismo, caries dentales graves, osteomalacia y osteoporosis senil son dolencias que su carencia ocasiona.


Esta vitamina da la energía suficiente al intestino para la absorción de nutrientes como el calcio y las proteínas. Es necesaria para la formación normal y protección de los huesos y dientes contra los efectos del bajo consumo de calcio. Esta vitamina se obtiene a través de provitaminas de origen animal que se activan en la piel por la acción de los rayos ultravioleta cuando tomamos "baños de sol". La carencia de vitamina D produce en los niños malformaciones óseas, caries dental y hasta Raquitismo, una enfermedad que produce malformación de los huesos.

 

En los adultos puede presentarse osteoporosis, reblandecimiento óseo u osteomalacia. Dosis insuficientes de vitamina D puede contribuir a la aparición del cáncer de mama, colon y próstata. Debido a que la vitamina D es soluble en grasa y se almacena en el cuerpo, exceder su consumo produce trastornos digestivos, vómito, diarrea, daños al riñón, hígado, corazón y pérdida de apetito.

 

La recomendación diaria de los adultos es de 5 a 10 mg. Una administración prolongada de esta vitamina puede producir efectos tóxicos en los adultos.

Alimentos ricos en vitamina D son los aceites de hígado de pescado, sardinas, arenques, salmón, atún, leche y otros lácteos, además de tomar el sol con precaución. Si el hábitat en el que se vive, es un lugar con altos niveles de contaminación es conveniente aumentar la dosis de esta vitamina. Hay que tener en cuenta que actúa mejor con la A, C, colina, y con calcio y fósforo. Broncearse provoca que la producción de esta vitamina a través del cuerpo, se detenga en parte.


Estructura de la Vitamina D:

 

 

VITAMINAS